Boquillas de pulverización diseñadas para sistemas de quemadores estándar. Las boquillas se fabrican cumpliendo con las normas EN 293 y EN 299, asegurando altos estándares de calidad y confiabilidad. Cada boquilla se somete a pruebas electrónicas exhaustivas para evaluar su capacidad y patrón de pulverización, garantizando resultados óptimos. Un quemador de gasóleo requiere atención y mantenimiento periódico para funcionar de manera fiable y eficiente, evitando riesgos. Se recomienda cambiar la boquilla anualmente, no solo para beneficiar al medio ambiente, sino también para mantener el rendimiento óptimo de tu sistema. Realizar revisiones periódicas contribuirá significativamente a la durabilidad y eficiencia general de tu quemador.