El protector tipo Cactus, es una malla electrosoldada galvanizada con unas características concretas diseñadas para realizar la protección de los árboles nacientes de animales o de otros agentes perjudiciales para su crecimiento. Como su propio nombre evoca, dispone de elementos punzantes alrededor de la malla, funcionando como elemento disuasorio y evitando que los animales accedan a los árboles en crecimiento, pero sin herirse. Las principales características son su ligereza, durabilidad y su fácil montaje. Este se realiza curvando la malla alrededor del árbol y sujetándola a elementos verticales, normalmente postes angulares (2) o corrugados de 12 mm (3), según necesidades. Además, disponemos de la corona cactus, que sirve como complemento a otros sistemas ya existentes con la localización concreta en una altura determinada, según necesidad.

El cerramiento de malla plegada, también llamada Hércules, está compuesto por una malla electrosoldada con varios pliegues, según su altura, en sentido longitudinal para dar mayor rigidez al paño. Presenta diversos acabados: colores (verde, blanco, etc.) y galvanizado, diponibles bajo consulta. Se fija a los postes mediante grapas o abrazaderas de manera muy sencilla, por debajo de los pliegues. Los postes pueden fijarse al suelo de dos formas: embutidos (por ello son más largos que la altura del cerramiento), o anclados al suelo mediante un soporte con placa para atornillar (para ello se debe cortar la parte sobrante de poste en su parte baja). Estos cerramientos son estéticos y de montaje rápido y fácil, ofreciendo una solución muy atractiva.

El cerramiento de simple torsión, también llamado "de rombo", está compuesto por una malla con un cuadro variable que se presenta en rollos y se va desplegando como un acordeón. Los postes utilizados son los redondos galvanizados, normalmente embutidos en el terreno. Una vez colocados estos, se disponen los alambres guías entre ellos, a los que se sujetará la malla posteriormente en tantos puntos como se necesite. Hay un poste para cada función, como se puede ver en la imagen proporcionada: de arranque (necesita 1 pata), intermedio, jabalcón (necesita 2 patas) y escuadra (necesita 2 patas). Estas patas se pueden atornillar o atar con alambre de atar, según preferencias. Es un cerramiento muy utilizado en parcelas, autovías y en obras.

Los tensores, como su propio nombre indica, son los elementos que confieren tensión a los alambres guía o directamente a los alambre de la malla desde las riostras, según el caso. Se fijan a las mismas con tornillos o con alambre de atar, según preferencias.

La valla de obra es un cerramiento de carácter temporal, que se utiliza, por ejemplo, en obras. Está compuesta por un panel metálico pregalvanizado de dimensiones 3,50x1,90 mts unido por soldadura a postes redondos pregalvanizados. Estos se introducen en pies de hormigón con doble agujero para que sirva de apoyo y sustento a paneles consecutivos, consiguiendo un montaje rápido y sencillo.