Los cerramientos agrícolas y ganaderos se realizan con postes de hierro realizados a partir de barras angulares y de Simple T, que se embuten en el terreno cada ciertos metros, según la rigidez que se le quiera dar al cerramiento. Los postes deben tener mayor longitud que la malla elegida, para poder embutir el resto. A estos se les realiza las perforaciones adaptadas a la distribución de la malla elegida, en caso de no haber elegido malla, se proporcionará la distribución estándar. Además, las riostras S.T. -60, llevan otras perforaciones en las alas para poder atornillar o atar las patas necesarias para distribuir los esfuerzos de tensión de la malla al suelo.